Si esta palabra no te suena, tranquila, que no es un nuevo deporte🤭.
‘Journaling’ es el término en inglés para lo que aquí conocemos como ‘escribir un diario’, pero con un propósito más allá de registrar lo que haces cada día. El objetivo del journaling es practicar la introspección, la creatividad y el auto descubrimiento a través de la escritura.
A través de la escritura podemos procesar emociones, organizar ideas, registrar vivencias y logros; para tomar consciencia de cómo influye en nosotros aquello que experimentamos.
En resumen, es una herramienta de autoconocimiento que integrada como hábito, ha demostrado tener una influencia muy positiva en la salud mental y emocional.
Entre los beneficios que aporta la práctica del journaling diario se encuentran:
El verdadero viaje de descubrimiento no consiste en buscar nuevos paisajes, sino en mirar con nuevos ojos
Marcel Proust
Cuando viajamos estamos mucho más receptivos al entorno que nos rodea. Todo es nuevo, sorprendente, inspirador…Estamos relajados y abiertos a cualquier estímulo, lo que también propicia el deseo de querer inmortalizar lo que nos hace sentir cada situación.
Todo esto hace que un viaje sea la ocasión perfecta para iniciarte en la práctica del journaling si eres principiante.
Si además el destino de ese viaje es Japón, al investigar un poco descubrirás que es el paraíso de ‘los coleccionables’. Los tickets de las entradas a los templos son preciosas, puedes coleccionar unas caligrafías especiales de cada castillo, sellos en estaciones de tren y otros establecimientos… En resumen, ya sólo por todo esto, merece la pena llevarte una libreta en blanco.
Pero a parte de esto, Japón está lleno de rincones inspiradores, que te animan a parar y reflexionar.
Por eso, si vas a viajar próximamente a Japón y te atrae la idea de comenzar un diario de viaje donde ir documentando cada nuevo descubrimiento y experiencia, te animo a practicar también un poco la introspección con estas 10 ideas:
Tanto si viajamos solos como en compañía, detrás de cada viaje siempre hay un ‘para qué’.
Viajamos para desconectar, para descubrir otras culturas, otras formas de vivir. Hay veces que viajamos para olvidar, para empezar de cero, para comenzar una nueva vida o incluso para descubrirnos a nosotros mismos.
Identificar y escribir sobre el propósito de tu viaje puede ser un comienzo perfecto para tu diario. También puedes escribir sobre si tienes alguna expectativa, si buscas conseguir algo en concreto o sobre los sentimientos que despiertan en ti al embarcarte en esta experiencia.
Como te decía, tu diario es un espacio seguro donde puedes permitirte expresar tus emociones sin miedo al juicio. Como a menos que así lo decidas, nadie más que tú va a tener acceso a él, tu diario es el lugar perfecto donde poder enfrentarte a tus miedos y bloqueos internos abiertamente. Al ponerlos por escrito te será más fácil identificar qué los provoca para poder trabajar en ellos y al tomar consciencia de cómo los vas superando, la confianza y la seguridad en ti, irán aumentando.
Puede que a lo largo de tu camino vayas conociendo a diferentes personas, (sobre todo si viajas en solitario o te unes a un viaje en grupo).
Si en algún momento de tu viaje conoces personas interesantes o que te inspiran o que han tenido un impacto positivo en ti aunque el encuentro haya sido muy breve, dedícales también un hueco especial en tu diario de viaje.
Las personas solemos contagiarnos, tanto para bien como para mal, de la energía de otras personas con las que nos rodeamos. Si frecuentamos reuniones creativas, nuestra creatividad también se desarrollará; si por el contrario, frecuentamos ambientes tóxicos, es muy posible que acabemos desarrollando conductas que nos perjudiquen.
Si identificas qué te inspiró de esas personas que conociste durante tu viaje y de qué forma te han hecho crecer, más adelante te será más fácil buscar nuevos ambientes donde contagiarte de esa energía positiva.
La mejor manera de darte cuenta cuánto llevas recorrido es dejarlo por escrito. Tendemos a fijarnos metas ambiciosas, que quedan lejos del punto en el que nos encontramos y si no tomamos consciencia de que nos estamos acercando, es muy fácil sentir frustración y acabar perdiendo la motivación al percibir que nos hemos estancado.
Por ellos, es crucial celebrar cada pequeño logro que nos ponga un paso más cerca de ese gran objetivo.
Durante tu viaje, dedica un momento de calma a hacer un poco de retrospectiva y anotar cada aprendizaje y logro personal que te acerque a lo que quieres conseguir en un futuro y a reflexionar sobre cómo se relacionan con tu situación actual (quizás el mismo viaje sea la celebración de alguna meta alcanzada o por el contrario, el primer paso para lograrla).
Otra idea puede ser anotar todo aquello que quisieras lograr / aprender con tu viaje y revisar una vez de vuelta, si has conseguido cumplir esos objetivos.
Antes de comenzar cualquiera de mis viajes en grupo a Japón, siempre realizo una sesión online donde aprendemos expresiones en japonés básicas pero de gran utilidad a la hora de encontrarnos allí.
Me gusta hacerlo porque creo que saber alguna que otra palabra o expresión como ‘gracias’, ‘estaba delicioso’ o ‘disculpe’, enriquece la experiencia de viaje al poder establecer una mínima conexión con la comunidad local.
Tu también puedes llevar en tu diario un registro de cada nueva palabra que aprendas, intentar utilizarla en algún punto de tu viaje y anotar de que forma influye esto en tu experiencia global.
No tienes que cargar con un kit completo de acuarelas ni apuntarte un mes antes del viaje a un curso online de Domestika para aprender a dibujar. El objetivo final de estos dibujos no es mostrarlos en tu feed de Instagram, sino entrenar tu creatividad.
Dibujar sin expectativas es una práctica liberadora que estimula la creatividad al eliminar el miedo al error y las presiones del resultado final. Al no preocuparte por crear algo “perfecto” o “útil”, permites que tu mente fluya de manera espontánea y auténtica, explorando nuevas ideas sin restricciones, lo que reduce el estrés y aumenta tu conexión con el momento presente.
Practicar el dibujo libre regularmente, desarrolla la confianza en tus habilidades, fortalece la intuición artística y expande tu capacidad de pensar de forma original.
A lo largo de tu viaje por Japón irás pasando por muchos lugares y situaciones diferentes que seguro que van despertando en ti todo tipo de emociones. Recogerlas en tiempo real, te ayudará a identificar los detonantes de cada una de ellas y a conocerte mejor. Conforme vayas avanzando en tu práctica te darás cuenta cómo estas emociones van evolucionando o cómo ciertas circunstancias ya no te afectan del mismo modo.
Si te sirve de utilidad, puedes hacerte preguntas como:
¿Qué siento en este momento? ¿Qué ha desencadenado esta emoción? ¿Qué puedo hacer para incentivarla o para dejarla ir?
Cuando viajamos solemos estar más presentes en el aquí y el ahora, sacándole el máximo jugo posible a nuestra experiencia. Por eso también es más fácil poner el foco en nosotros mismos y darnos cuenta de algunos aspectos de los que no somos conscientes durante nuestra rutina.
Si queremos conocernos un poco mejor, a lo largo de nuestro viaje podemos plantearnos preguntas como:
¿Qué me ha hecho verdaderamente feliz hoy?
¿Qué me gustaría hacer cuando termine este viaje?
¿Qué quiero dejar atrás?
¿Estoy viviendo acorde a mis valores y prioridades?
¿Qué es lo que más valoro ahora mismo?
Hacerte preguntas de este tipo te ayudará a dirigir tu energía hacia aquello que quieres conseguir o mantener en tu vida.
Este ejercicio también favorece el desarrollo de la creatividad y sobre todo ayuda a liberar tensiones y bloqueos.
Se trata de escribir todo lo que pase por tu mente durante 10 minutos sin pararte a pensar, por lo que si eres una persona que sobre piensa en exceso (como yo) al principio te supondrá un auténtico reto; pero si mantienes esta práctica en el tiempo, verás como cada vez te resulta más fácil soltar.
A medida que se acerque el final de tu viaje puedes dedicar unas páginas de tu diario a redactar una carta para tu ‘yo’ del futuro, contándole donde te encuentras, cuáles son tus sueños, los miedos que has conseguido superar y los nuevos que han aparecido; cuáles fueron tus mayores retos y aprendizajes…
Esta carta recogerá el resultado de todo el trabajo de auto conocimiento que habrás hecho durante tu viaje y con el paso de los años en un recordatorio de todo lo que creciste con tu experiencia de viaje.
Japón está lleno de rincones que invitan a la contemplación y la introspección.
A continuación te cito una lista de lugares perfectos donde parar y dedicarle unos minutos a tu cuaderno de viaje:
Espero que todas estas ideas te sirvan para que incorporar el hábito del journaling en tu viaje y tu día a día te resulte más fácil y motivador.
Y si quieres unirte a uno de mis viajes en grupo, tendrás la oportunidad perfecta para comenzar a integrar este hábito al mismo tiempo que descubres los rincones más inspiradores de Japón.
Arigatō Gozaimasu por leerme y hasta la próxima!
Matane!